1
2
3
4
Romería de Tiermes
Entre las fiestas importantes del Sur hay dos que bien merecen una cita. La primera es la Romería de Nuestra Señora de Tiermes, que dos veces al año congrega a numerosas personas, lo que ocurre desde que se fundó la Cofradía en 1875.
Durante la fiesta, se celebra una misa, se hace una procesión, se realiza una subasta de banzos y de ofrendas y se baila al son de las dulzainas. El que quiere, después, se acerca a las praderas a celebrar una comida campestre y el que no, come en el restaurante Venta de Tiermes.
La devoción tiene siglos de existencia y ha sido la causa de que se mantengan los actos y se conserve la propia ermita románica, situada junto a las excavaciones de la ciudad celtíbero-romana.
Una de las personas que trabajaron por mantener esta fiesta, durante los últimos años fue Felipe, el Alcalde de Montejo de Tiermes. Era feliz con la romería y con la fiesta. Las praderas de Tiermes ya no podrán contar con él, pero siempre le sentiremos junto a nosotros allí.
Procesión del Corpus.
El Burgo de Osma
Una de las festividades más vistosas de la provincia de Soria es la celebración del Corpus Christi de El Burgo de Osma. Durante meses, del orden de 400 voluntarios preparan los dibujos, las virutas de madera teñidas y la hierba que colocan ese día para alfombrar la Plaza de la Catedral, la Calle Mayor y la Plaza Mayor de la ciudad.
A lo largo de la tarde anterior, la noche y la misma mañana de la festividad, se realizan con precisión las composiciones. Después, la procesión pasará sobre los cerca de 600 metros de alfombras, saliendo de la magnífica catedral de El Burgo y volviendo a ella al acabar. Así fue este año también y, además de poder contemplar la belleza del trabajo realizado, fue muy reconfortante ver la villa llena de propios y extraños, de pequeños y mayores dispuestos a pasar un agradable día de fiesta.
EL DÍA DE LA COMARCA
Todos los años, en agosto, el suroeste de la provincia de Soria celebra el Día de la Comarca de Tiermes. Se trata de una fiesta en la que el pueblo que lo organiza recupera las tradiciones de la zona en forma de actividades
Se hacen competiciones de tanguilla, de bolos, se baila al son instrumentos tradicionales, dulzainas y tambores, hay pasacalles y todo lo que se le ocurre a los organizadores.
También se organiza un obra de teatro, que se representa en el graderío rupestre de la ciudad celtíbero-romana.
HERMANAMIENTO DE MONTEJO DE TIERMES Y VALERIA
Hace unos años, aprovechando el Día de la Comarca de Tiermes, se realizó el hermanamiento de los municipios de Montejo de Tiermes y del conquense de Valeria.
Ambos lugares tienen un gran interés, pues en ellos hay restos de una ciudad celtíbera y romana, con viviendas rupestres en las zonas de risco, en el caso de Valeria asomadas al bello espacio natural de la hoz del río Gritos y en el de TIermes a la hondonada previa a la sierra de Pela, y sometidas a excavaciones arqueológicas. Eso sí, mientras que Tiermes se abandonó en el medievo, la ciudad actual de Valeria ocupó las proximidades del yacimiento.
EL PLENILUNIO EN ARENILLAS
Hace unos años, Arenillas celebró el plenilunio de forma muy original. Los asistentes se reunieron en el pueblo a las 20,00 horas y comenzaron un bello paseo hasta un paraje, conocido como la Dehesa del Monte, situado en el pequeño cañón del río Parado. Allí, en una finca de labor en barbecho prepararon hogueras y unas inmensas parrillas, para dar de merendar a las 150 personas que acudieron, un improvisado escenario con los riscos como telón de fondo y bancos para los que quisieron escuchar un concierto de violas que el Dúo Casulana realizó cuando la luna iluminaba ya el lugar.
El mágico ambiente se vio potenciado por las altas hogueras, que reflejaban sus cambiantes llamas sobre las paredes de roca, y por la propia luna, que plateaba los contornos de lo que se encontraba lejos de las hogueras.
Se escribieron deseos en papeles que fueron quemados en las hogueras, se continuó con un chocolate para paliar el fresco ambiente nocturno y hubo quien se quedó hasta el amanecer para vivir la fiesta hasta el final.
Cualquier acto es bien acogido y aplaudido en el Sur de Soria, pero será difícil olvidar una noche como aquella y, sobre todo, el sonido de las violas en la noche, en un paraje tan bello como lo es la Dehesa del Monte, iluminado por hogueras, velas y la luna llena.